"La ganadería -cronológicamente la primera de las riquezas argentinas- conservó durante siglos una característica primitiva y rudimentaria hasta que la aparición del alambrado permitió parcelar en potreros las grandes extensiones, facilitó la cruza de haciendas criollas por medio de reproductores seleccionados, el mejoramiento de la calidad de los pastos y el cultivo de los campos. Se puede afirmar, por ello, que el alambrado inauguró una nueva época en la historia económica de la República Argentina. Este libro es, en cierto modo, la biografía de ese personaje inanimado pero actuante que es el alambrado. El autor presenta una historia amena, vivida y documentada de ese modificador de usos y costumbres seculares, en la que son principalísimos actores Ricardo B. Newton, que introdujo el alambre en el país en 184,5, 7 Francisco Halbach, el primero que -diez años más tarde- alambró en todo su perímetro una estancia argentina: "Los Remedios"."