En la poesía de Ida Vitale nos enfrentamos a un mundo en constante dilución, que oculta sus certezas y deja al hombre siempre en el trayecto inacabado de construirse, de inventarse, librado a sus fuerzas y sometido al férreo tiempo. Vivir es ir haciendo un inventario de lo fugaz: "se pierde / hasta el último resplandor / de las alguna vez vistas estrellas". La realidad aparece o se esfuma siguiendo leyes incomprensibles: "todo estaba a mi alcance / todo de pronto es nada"; "vano zurcidos / el dibujo trivial de nuestro gesto / improbable amuleto / contra la emigración de las certezas". En esta lucha perpetua con la sombra, en este continuo ir a menos y colocarse siempre en el límite y la pérdida se encuentra la obra de esta poeta uruguaya, que ya en la plenitud entrevé el caos y en toda claridad el misterio que asoma. La única salvación posible, para Vitale, es refugiarse en la intensidad, el rescate hacia adentro, la constancia en el dolor, lúcida y voluntariosa, que permite transmutar 'el duelo en canto': "Contra lo sordo / te levantas en música, / contra lo ardido, manas". El presente volumen recoge toda la obra poética de Ida Vitale hasta 1984: 'La luz de esta memoria' (1949), 'Palabra dada' (1953), 'Cada uno en su noche' (1960), 'Oidor andante' (1972), 'Jardín de sílice' (1980) y 'Sueños de la constancia' (1984).